Los fisioterapeutas alertan del alto número de problemas de salud causados por malas posturas durante el descanso.
- Dormir adoptando posturas inadecuadas puede generar tendinitis y problemas de desviación de columna, entre otras patologías
- Aconsejan los colchones de dureza intermedia, así como elegir la almohada, teniendo en cuenta la posición en la que se duerma
Madrid, julio de 2010.- El Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid alerta del alto índice de problemas de salud provocados por las malas posturas durante el descanso. Por este motivo, recomiendan elegir la almohada y el colchón, en función de la posición que se adopte para dormir, con el fin de evitar futuros problemas músculo-esqueléticos.
Los fisioterapeutas aseguran que, cada vez con más frecuencia, acuden a sus consultas pacientes con cervicalgias o dolores de brazos y espalda, provocados por dormir con almohadas inadecuadas o en posiciones incorrectas, como abrazando la almohada o con las muñecas flexionadas.
Así, el secretario general del Colegio, José Santos, asegura que “dormir adoptando posturas inadecuadas, puede provocar tendinitis, atrapamiento en el túnel carpiano y problemas de desviación de columna, entre otras patologías”. Además, añade que “dormir mal puede afectar a nuestro rendimiento y nos hace más susceptibles de padecer enfermedades”.
De esta manera, informa que con bastante frecuencia, en las consultas de fisioterapia se atiende a pacientes con problemas de espalda en la zona dorsal y lumbar, provocados por hábitos como “utilizar colchones de dureza alta, así como utilizarlos con un somier canapé, que hace aún más dura la superficie”.
Los expertos aseguran que un colchón excesivamente duro es tan perjudicial como uno demasiado blando, en el que la columna “flota” sin la debida sujeción. Así, recomiendan los de dureza media. “Un buen colchón es aquél que se amolda perfectamente al cuerpo y a las articulaciones”, aseguran, pero aconsejan compensar la dureza del colchón con la elección del soporte del mismo (somier de láminas o canapé).
Asimismo, señalan que para garantizar un descanso apropiado, las dimensiones del colchón deben ser de 15 centímetros como mínimo de grosor; 80 centímetros para una cama individual y 135 centímetros para una doble, de ancho y de alto, 10 centímetros más que la altura de quien dormirá en él.
En cuanto a la almohada, Santos desmiente el mito de que “es más sano dormir sin ella”. “La cabeza necesita un apoyo para que la columna vertebral permanezca en su posición natural y no quede sometida a ningún tipo de tensión”, informa.
Así, asegura que para elegir la que más nos conviene, hay que tener en cuenta la posición que adoptamos para dormir, de manera que si se duerme boca arriba, se recomienda una almohada fina y si se hace apoyado sobre un hombro, una gruesa. Igualmente, los fisioterapeutas aconsejan no dormir boca abajo, ya que al hacerlo se puede modificar la curvatura de la columna lumbar, al mantener el cuello girado para poder respirar durante varias horas.
Además, señala que si se duerme en pareja, es importante que cada uno tenga una almohada adaptada a sus necesidades. “El relleno no debe ser ni excesivamente blando, ni demasiado duro; debe tener la firmeza necesaria para evitar que la cabeza caiga hacia atrás, pero es importante que no sea tan dura que fuerce el cuello hacia delante”, añade.
Por otra parte, apunta que la manera en la que nos levantamos de la cama también puede hacer que nuestra zona lumbar y nuestro cuello sufran y acumulen tensiones. Así, informa de que la forma correcta de realizar este movimiento es, “ponerse de lado sobre la cama, bajar en primer lugar las piernas, y con la ayuda de los brazos levantar el tronco y sentarnos, antes de incorporarnos totalmente”.
Igualmente recomiendan no colocar la cama pegada a la pared, para poder colocar la colcha, etc., desde cada uno de sus lados evitar así el riesgo de sufrir lumbalgias.
Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid
El Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid es una organización que representa a nivel autonómico a más de 6.700 fisioterapeutas. Sus objetivos son la salvaguardia de los principios deontológicos y ético-sociales de la fisioterapia, la defensa y la promoción de la salud y el bienestar de los ciudadanos de la Comunidad de Madrid, en colaboración con los poderes públicos, así como la promoción a nivel científico, cultural, económico y social de los colegiados.
Fuente: NoticiasMedicas.es