Habitualmente llegan a las consultas de fisioterapia pacientes con dolor en el talón, generalmente se quejan de que les duele sobretodo por las mañanas, en el primer apoyo en el suelo. Refieren que el dolor se les va pasando a medida que se les va "calentando" la zona, y generalmente al final del día cuando han estado caminando mucho les duele más.
El espolón es una proliferación ósea que aparece en la parte anterior del hueso calcáneo del pié, que según se cree todavía en algunas consultas de traumatología aparece de manera espontánea como una calcificación "pegada" al hueso, y cuando se complica con fascitis plantar es cuando ocasiona dolor, explicando así que a muchos pacientes no les duela y en la radiografía les haya aparecido.
Antes de explicar el origen, para luego entenderlo mejor, es importante aclarar que el tejido fascial es único y no va a porciones por el cuerpo como se creía hace años. Para éste proceso hay que situar la fascia de la región plantar, que se inserta en la zona de la "almohadilla de la planta del pie" (cabeza de los metatarsianos), y en el borde anteroinferior del calcáneo, continuando posteriormente por la parte trasera de la pierna hacia la espalda.
El aumento de tensión en la región plantar al caminar de manera incorrecta, generalmente apoyando el peso en la zona delantera del pie, ya sea por usar tacones habitualmente, por sobrepeso, por alguna alteración de la marcha, por sobrecargas musculares o modificación de la postura (ésto daría para un post entero), la fascia se tensa demasiado para soportar los huesos de la bóveda plantar, y tira de la inserción en el calcáneo.
La inserción fascial en el calcáneo se realiza en una zona de colágeno que recubre el hueso llamada periostio, que es más facilmente maleable y al aumentar la tensión se crea un efecto de "Tienda de Campaña" que genera un vacio dentro del hueso. Ya hemos explicado antes en el blog(Nacemos o nos hacemos), que los huesos están en continuo crecimiento y regeneración, y como es normal el cuerpo intenta rellenar ese hueco con más hueso, creando así la imagen del Espolón.
Si el dolor lo ocasionase la inflamación de la fascia plantar, corrigiendo este problema debería mejorar la sintomatología, las infiltraciones de corticoides son el tratamiento de elección por muchos traumatólogos, pero no siempre se alivia, llegando incluso a la cirugía. Sin embargo, la fascitis plantar no suele ocasionar dolor en la zona del talón, sino en el centro de la planta del pie, o bien en su inserción en los metatarsianos, debido a la compresión de la misma al caminar o apoyarse. También al llevar la terminación "-itis" podemos tener en cuenta para su tratamiento lo que hablamos sobre el proceso inflamatorio como agente regenerador y no como problema en sí.
El dolor en el talón (talalgia) puede estar más relacionado con la aparición de un punto gatillo miofascial en la región interna del sóleo. Siendo así, al desactivar el PGM desaparece la sensación de dolor al apoyar el talón. De ahí la importancia de entender que la fascia es un tejido continuo que no se limita a la planta del pie.
El espolón calcáneo no es el problema, sino un síntoma más de una descompesación miofascial (músculo-fascia) en la zona posterior de la pierna. Que puede estar ocasionado, como ya hemos explicado por un calzado inadecuado, por subir escaleras de manera incorrecta, por mantener la misma postura durante mucho tiempo, incluso al dormir, por no realizar correctamente estiramientos en la práctica deportiva, o simplemente por sobrepeso.
Debido a la complejidad del sistema y a la cantidad de factores que intervienen, siempre debe ser un profesional sanitario el que valore el problema para adecuar el tratamiento a la causa concreta en cada caso.